Acción realizada frente al Ministerio de Educación de Venezuela, Caracas, en 2017, luego de una protesta en uno de los edificios de Defensa Pública de la capital contra Nicolás Maduro, el sucesor del fallecido Hugo Chaves, y su encarcelamiento infundado y asesinatos de ciudadanos que protestaban contra las políticas internas del gobierno socialista.
La primera acción fue organizada por la poeta, artista visual y de performance venezolana Érika Ordosgoitti (Caracas, 1980). En la primera acción, el artista recibió una camiseta con la letra 'E', que, al combinarse con las camisetas del otro participante, deletreaba la frase 'Pude haber sido yo', en el segundo acto realizado por el artista. , la letra 'E' se apropia para significar la palabra 'Educación'.
El título de la acción remite a la expresión “LA UNIVERSIDAD DE LA CALLE”, que recupera (o, mejor, se acerca a designar una recuperación de) uno de los aspectos fundamentales del proceso de humanización, que, en el caso de Venezuela, se convirtió en un proceso de deshumanización fáctica inherente a las agendas comunistas y socialistas, aunque no a su discurso.
Somos humanos porque logramos atribuir significado al mundo. Entonces "ellos" le enseñaron a esta nueva generación cómo darle sentido al mundo y qué sentido deberíamos darle.
En última instancia, cuando tratamos de estudiar el mundo, lo que estudiamos es la forma en que el discurso social, el que se nos “permite” percibir, nos permite percibir ese mundo.
Authoritative governments know that this mediating social discourse is made up of the set of texts constructed with symbols, images and objects and behaviors and reconstructed, always from a contemporaneity, such as the updating of historical social discourses that have managed to remain memorized, such as the propagation of the current social discourses that have managed to be perceived, and as the exhibition of social behaviors that have managed to become demonstrable.
Universidad Bolivariana de Venezuela
Mucho se habla de la Universidad Bolivariana de Venezuela. Para algunos, fue un lugar donde “los guerreros de las nuevas batallas se enfrentan a las hegemonías del mundo desarrollado”. Para otros, es simplemente la peor universidad del país.
Para pesar de muchos, el sistema educativo venezolano, en particular el de educación superior, se ha desmantelado por completo en los últimos 20 años debido a la falta de financiación, la imposición de adoctrinadores de programas socialistas y el posterior éxodo de personal académico crítico. Por su parte, la Universidad Bolivariana es hoy un recinto del oscurantismo, un lugar donde reina la anti-academia, la negación del pensamiento, el conocimiento y la investigación.
